“En el mundo actual no es suficiente que el gobierno de los países elija métodos y tome medidas tendientes a orientar las soluciones económicas. Es menester que el pueblo participe en ellas y se empeñe en la realización de los planes trazados por el gobierno. Los fenómenos económicos actuales fruto de una cambiante, irregular y caótica situación mundial (algo que hoy se escucha cotidianamente), no requieren sistemas, sino reclaman soluciones concretas adaptadas a cada situación particular”, señaló Perón en la apertura de su discurso anunciando lo que luego se conoció como “Plan de Austeridad”.
NOTA DE SUBSUELO: "El Plan de Austeridad establecido por Juan Domingo Perón en 1952, con mala intención suele ser olvidado y poco tenido en cuenta a la hora de evaluar experiencias de recuperación económica. Dicho plan hizo posible que durante los años siguientes, hasta el golpe de septiembre de 1955, la Argentina lograse resultados exitosos en materia económica. Luego de la reelección de Juan Domingo Perón, las variables económicas presentaban oscuros nubarrones sobre el futuro de la sociedad argentina debido a dos motivos principales: dos años sucesivos de sequía en la Pampa Húmeda redujeron sustancialmente el excedente exportable, lo cual provocó una significativa disminución de las reservas. Por otro lado, la política de boicot de los EEUU restringía los mercados potenciales para los productos argentinos y nos privaba del aprovisionamiento de los repuestos indispensables para la industria nacional que tenía récords de producción en los años previos."
La economía actual de nuestro País, un país en el cual la producción de alimentos alcanza para atender las necesidades de 440 millones de personas, vemos con los ojos llenos de lágrimas niños, abuelos, sin un plato de comida en sus mesas, sin medicamentos, en muchos casos sin un techo, viviendo en situación de calle. Jóvenes y trabajadores excluidos del sistema, despidos, persecución, deserción escolar, una lista infinita que lleva a una situación de angustia, yo diría INSOPORTABLE, perdiendo sueños y esperanzas, arrebatados por un gobierno neoliberal que sólo ve en nosotros números no personas, arrebatándonos lo más preciado del ser humano, "NUESTRA DIGNIDAD".
Esto merece que cada uno de nosotros reflexionemos: ¿hacia dónde vamos? Que daño tan grande hacemos al permitir semejante acto de crueldad por un grupo minúsculo que, históricamente se han adueñado de nuestras riquezas y del fruto de nuestro trabajo, desde tiempos de antaño, esos que hoy nos gobiernan y nos dicen como vivir.
La "dignidad", palabra que enorgullece a la persona, hoy desaparece con estas políticas de ajuste, del sálvese quien pueda, de un gobierno de ricos para ricos, y los demás.....sobramos.
Pero hay un rayito de luz, volver a creer, porque podemos decidir, y la posibilidad la tenemos en nuestras manos. ¿Qué queremos?: un País dónde sólo unos pocos vivan bien o un Pais que incluya nuevamente al Pueblo a todos y cada uno de los argentinos, para volver a soñar, para volver a sentirnos DIGNOS. No es menor la decisión no es más ni menos que volver a trazar EL DESTINO DE LA PATRIA.
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